Quédate conmigo a hora
Déjame sentir tus manos
Quiero estar dentro de ti
Invadiendo tus instintos
Extraño tus caricias, tus uñas en mi piel
Tus labios, tu sonrisa, tu forma de morder
Extraño, la fuerza de tus brazos
Los mismos que me cargaban hasta la cama prohibida
Extraño nuestros momentos
Nuestras miradas esquivas
Tu aroma quedaba en mi cuerpo
Como sello de nuestro encuentro
Tus besos quedaban en mi mente
Cual fuego caliente que hace arder mi egoísmo
Ella es mi amiga, mas que una hermana leal
Y yo una pobre loca que no te deja de amar
Ella es la parte dulce de tu vida, es tu casa, tu familia, tu hogar
Yo un secreto, tu demencia vespertina
Yo tu vida oculta, que sobrevive en la clandestinidad
Ella suave, como la brisa marina
Yo como olas que golpeando la roca va
Lucho por un instante de tus labios
Ella en cambio, los deja pasar
No te merece, ni merece tus besos
Ella se inmuta, se va altiva
No le duele, tus dolores en el pecho
No cabalga contigo en la soledad
No disfraza su necedad
No te busca en juegos de alcoba
No te sabe respirar
Para mi lo eres todo
Eres más que un momento de placer
Si te duele el alma, me enveneno yo primero
Antes de oírte quejando por segunda vez
Te abrazo con mis pensamientos
Te acompaño en el amanecer
Y aunque quieres salir huyendo y terminar con ella, te lo prohíbo Una y otra vez
Te hablo de una posibilidad, volver con ella intentarlo una vez más
De entenderla, de protegerla, de sacrificar mi propia alma
Con tal de no ver destruido tu hogar
Pero ella, no reacciona, no hace nada para retenerte
Más te lanza a mis brazos abiertos
Que dan ganas de cobijarte, te estrujarte, de quererte
Pero no puedo, ella es mi amiga más que una hermana
Ya lo vez.
Seguimos abrazados, sin ganas de que llegue el amanecer
Seguimos perturbados con un amor que nos limita
Si fuéramos capaces de olvidarnos de todo
Y luchar por este amor
Luchar por quedarnos así
Abrazados sin miedo
Esperando un nuevo día.
Quédate conmigo a hora
No te vayas nunca jamás
Déjame sentir tus manos
Quiero estar dentro de ti
Invadiendo tus instintos
Extraño tus caricias, tus uñas en mi piel
Tus labios, tu sonrisa, tu forma de morder
Extraño, la fuerza de tus brazos
Los mismos que me cargaban hasta la cama prohibida
Extraño nuestros momentos
Nuestras miradas esquivas
Tu aroma quedaba en mi cuerpo
Como sello de nuestro encuentro
Tus besos quedaban en mi mente
Cual fuego caliente que hace arder mi egoísmo
Ella es mi amiga, mas que una hermana leal
Y yo una pobre loca que no te deja de amar
Ella es la parte dulce de tu vida, es tu casa, tu familia, tu hogar
Yo un secreto, tu demencia vespertina
Yo tu vida oculta, que sobrevive en la clandestinidad
Ella suave, como la brisa marina
Yo como olas que golpeando la roca va
Lucho por un instante de tus labios
Ella en cambio, los deja pasar
No te merece, ni merece tus besos
Ella se inmuta, se va altiva
No le duele, tus dolores en el pecho
No cabalga contigo en la soledad
No disfraza su necedad
No te busca en juegos de alcoba
No te sabe respirar
Para mi lo eres todo
Eres más que un momento de placer
Si te duele el alma, me enveneno yo primero
Antes de oírte quejando por segunda vez
Te abrazo con mis pensamientos
Te acompaño en el amanecer
Y aunque quieres salir huyendo y terminar con ella, te lo prohíbo Una y otra vez
Te hablo de una posibilidad, volver con ella intentarlo una vez más
De entenderla, de protegerla, de sacrificar mi propia alma
Con tal de no ver destruido tu hogar
Pero ella, no reacciona, no hace nada para retenerte
Más te lanza a mis brazos abiertos
Que dan ganas de cobijarte, te estrujarte, de quererte
Pero no puedo, ella es mi amiga más que una hermana
Ya lo vez.
Seguimos abrazados, sin ganas de que llegue el amanecer
Seguimos perturbados con un amor que nos limita
Si fuéramos capaces de olvidarnos de todo
Y luchar por este amor
Luchar por quedarnos así
Abrazados sin miedo
Esperando un nuevo día.
Quédate conmigo a hora
No te vayas nunca jamás
